Directiva 96/2011 / UE (la llamada directiva madre-hija) proporciona un régimen particularmente ventajoso para las empresas “madres” que reciben dividendos de empresas “hijas” residente en un estado miembro de la UE que no sea el de residencia del “madre”.
Los convenios contra la doble imposición tienen un papel fundamental pero a menudo surgen problemas en cuanto a su aplicabilidad cuando una de las partes involucradas en una transacción internacional debe ser considerada transparente.
Los tratados de doble imposición son tratados que normalmente solo involucran a dos estados y proporcionan reglas específicas sobre qué estado tiene derecho a gravar los ingresos en todas aquellas situaciones en las que estos ingresos están vinculados a ambos estados..